EL LADRÓN SILENCIOSO DE LA VISTA

EL LADRÓN SILENCIOSO DE LA VISTA

Una  de las principales causas de ceguera en el mundo es una categoría de enfermedad ocular llamada glaucoma. La forma más común resulta en un aumento de la presión ocular que daña el nervio óptico. Esto puede resultar en la pérdida permanente de la visión a medida que la enfermedad progresa. Para las poblaciones negras, el glaucoma ataca hasta una década antes y empeora más rápido que para las poblaciones blancas. Los latinos también corren un mayor riesgo. No hay cura para la enfermedad, pero los efectos del glaucoma pueden ralentizarse o detenerse si se identifican temprano a través de exámenes de rutina. 

El glaucoma a menudo se conoce como un "ladrón silencioso de la vista" porque no hay síntomas tempranos, por lo que el 50% de las personas con glaucoma no saben que lo tienen. Más de 76 millones de personas sufren discapacidad visual irreversible como resultado de la enfermedad. Un efecto de los accidentes cerebrovasculares puede causar la misma condición que afecta a otros 33 millones de pacientes. 

A partir de los 40 años de edad, los hombres negros especialmente son más propensos a desarrollar glaucoma. Las poblaciones negras y latinas en general tienen de cuatro a cinco veces más probabilidades de desarrollar glaucoma que otras. 

Además, más del 75% de los latinos desconocen el mayor riesgo de glaucoma asociados con su origen étnico. Se predice que para 2050, la mitad de los estadounidenses que viven con glaucoma serán de origen latino.  

Hay una serie de otros factores de riesgo más allá de la raza y la edad. El glaucoma tiende a ser hereditario. Si alguien en la familia lo tiene, hay una buena posibilidad de que otros también lo hagan. Tener ciertas afecciones médicas, como diabetes, enfermedades cardíacas, presión arterial alta y anemia de células falciformes, todas las enfermedades observadas a tasas más altas en la comunidad negra, podría aumentar drásticamente el riesgo de glaucoma. La obesidad y / o tener un hábito de fumar son otros factores a tener en cuenta, advierten los expertos médicos. 

Actualmente, las pruebas de detección de glaucoma se realizan principalmente en una máquina llamada Humphrey Field Analyzer (Zeiss). Este, al igual que otros equipos comunes a la oficina de un oftalmólogo, está en una habitación oscura, incluye un reposo en la barbilla y requiere que un paciente esté absolutamente quieto mientras un técnico del personal lo instruye a través del examen. Este método ha sido estándar durante décadas, pero hay nuevos métodos de precisión comparable, tal vez superior, disponibles. 

Heru (www.seeheru.com) ha desarrollado una plataforma de diagnóstico portátil utilizando pantallas montadas en la cabeza AR / VR disponibles comercialmente.  Los auriculares portátiles de Heru pueden realizar una prueba de detección de glaucoma, degeneración macular relacionada con la edad y otras deficiencias de la visión en cualquier lugar y en cualquier momento, incluso en lugares remotos. Programado con sensores y software de última generación, la tecnología elimina la necesidad de equipos de diagnóstico voluminosos, estacionarios y costosos. La plataforma de Heru no requiere un cuarto oscuro dedicado o espacio de prueba. Una personalidad virtual de Heru a bordo  está programada para guiar a los pacientes a través del examen, eliminando la necesidad de un técnico del personal para administrar la detección.  

A pesar de los avances en la tecnología de detección simplificada y el mayor riesgo de glaucoma para las comunidades negras e hispanas, se encontraron disparidades  en la utilización del cuidado de los ojos que agravan una afección a menudo prevenible para ellos. En un análisis reciente, a menos personas negras e hispanas se les revisaron los ojos de forma rutinaria que a las personas blancas, y también experimentaron más incidentes relacionados con los ojos que requirieron atención médica que los blancos. 

La pandemia de COVID-19 también exacerbó las tasas de glaucoma al impedir que las personas se hicieran los chequeos y exámenes anuales recomendados. Los efectos de la pandemia empeoraron una mala condición al permitir que la enfermedad progresara silenciosamente sin dar a las poblaciones especialmente vulnerables la oportunidad de protegerse contra ella. 

La prevención de la ceguera debido al glaucoma requiere identificarla antes de que comience a ocurrir la pérdida de la visión. Si se detecta lo suficientemente temprano, se pueden tomar medidas para evitar la progresión de la enfermedad. Los Centros para el Control de Enfermedades recomiendan que las personas con diabetes deben hacerse un examen de la vista cada año y que las personas que tienen un mayor riesgo de glaucoma, los afroamericanos de 40 años o más, todos los adultos mayores de 60 años, especialmente los mexicoamericanos, y las personas con antecedentes familiares de glaucoma deben hacerse un examen de la vista cada 2 años.