Biden enfrenta el desafío de guiar a Estados Unidos más allá de la era Trump

Biden enfrenta el desafío de guiar a 

Estados Unidos más allá de la era Trump

Washington (AP) — El presidente electo Joe Biden apareció en la televisión la semana pasada mientras un grupo bipartidista de legisladores se reunieron en un lugar no revelado para protegerlos de una turba violenta que saqueaba el Capitolio de Estados Unidos.

“Toda la sala quedó en silencio”, recordó la senadora Amy Klobuchar, demócrata por Minnesota, mientras todos escuchaban a Biden denunciar la insurrección y pedir calma.

La manera respetuosa en la que los legisladores escucharon a Biden durante uno de los momentos más oscuros de Estados Unidos le dio a Klobuchar la esperanza de que el nuevo presidente tenga la oportunidad de guiar al país más allá del tumultuoso tramo final de la presidencia de Donald Trump.

Eso se está convirtiendo rápidamente en una de las principales tareas de Biden mientras se prepara para asumir el cargo el 20 de enero. Es un desafío inmensamente complejo, que le obliga a equilibrar las demandas de responsabilidad después de que Trump incitó a los disturbios contra aquellos que se preocupan por dividir aún más al país.

Cualquier paso en falso no solo podría intensificar la polarización de la nación, sino también amenazar la capacidad de Biden para obtener la rápida aprobación del Congreso de las elecciones de su gabinete y otras prioridades, como la legislación de respuesta al coronavirus.

Por ahora, Biden parece contento con dejar las decisiones sobre el destino de Trump en manos del Congreso.

“Lo que el Congreso decide hacer es que ellos decidan”, dijo Biden a los periodistas la semana pasada. “Pero voy a tener que hacerlo y ellos van a tener que estar listos para comenzar de inmediato, porque cuando Kamala (Harris) y yo juramos, vamos a presentar, de inmediato, piezas importantes de legislación que se ocupará del virus, se ocupará de la economía y se ocupará del crecimiento económico”.

Dos senadores republicanos, Lisa Murkowski de Alaska y Patrick Toomey de Pensilvania, pidieron a Trump que dimita.

Sin eso, los demócratas de la Cámara de Representantes se están moviendo rápidamente para introducir artículos de juicio político el lunes y votar el martes. Eso le daría una salida a los legisladores para condenar formalmente a Trump, pero retrasaría un juicio en el Senado hasta que Biden aborde otras prioridades durante sus primeros 100 días.

Biden esencialmente enmarcó su campaña presidencial como una respuesta a Trump, prometiendo “restaurar el alma” de Estados Unidos. Dijo que decidió acudir a la Casa Blanca después de ver a Trump decir que había “gente muy buena en ambos lados” de una manifestación mortal de supremacistas blancos en Charlottesville, Virginia.

Aún así, la insurrección agudiza el debate sobre cómo romper con la era Trump.

Muchos demócratas dicen que la mejor manera de que Biden unifique la nación y restaure la fe en el gobierno es lograr resultados tangibles en temas que importan a todos los estadounidenses, incluida la pandemia del coronavirus y la economía.

“Necesitamos sacar la vacuna”, dijo Klobuchar. “Necesitamos que la economía vuelva a donde estaba para que sea el número uno en su agenda número uno en nuestra agenda para que comience con lo que es el número uno en la agenda de todos”.