Somos una Nación Dependiente de los Inmigrantes
Oklahoma city, Oklahoma.-Los distintos eventos conmemorando el "día sin inmigrantes", realizado en ciudades de todo el país el pasado jueves 16 de Febrero para luchar contra las políticas antiinmigrantes del Presidente Trump, puso en relieve una realidad clave de los Estados Unidos: Somos una nación dependiente de los inmigrantes, incluyedo a los indocumentados. El día sin inmigrantes estuvo marcado por las protestas callejeras, los trabajadores inmigrantes en general (documentados e indocumentados ausentes a sus lugares de trabajo y los niños permanecieron en sus horages, sin asistir a la escuela.
El mensaje fue simple: los immigrantes, sin contar a los nativos nacidos en los Estados Unidos, quienes creen en los derechos de los immigrantes, no son un grupo de personas pasivas insignificantes.
La economía estadounidense se basan en el trabajo de los inmigrantes, esto innegable:
• 26.7 millones de trabajadores inmigrantes de la nación, incluyendo los indocumentados, residentes permanentes legales (LPRs) y ciudadanos naturalizados de los Estados Unidos ascienden a casi el 17 por ciento de la fuerza de trabajo total.
• El no autorizado en particular, que es uno de los objetivos principales en la campaña de Trump, son una formidable presencia económica. Uno de cada 20 trabajadores en los Estados Unidos (5 por ciento) es indocumentado, más de uno de cada cuatro (26%) de los trabajadores en la agricultura y 15 por ciento en la construcción
El día sin inmigrantes llamó la atención sobre el hecho de que muchas empresas cerrarían si pierden a sus trabajadores inmigrantes. Pero el poder de este evento corre encabezado por la intransigencia de un presidente que tiene la intención de crear su propio "día sin inmigrantes".
Entre los negocios que apoyaron “Un día sin Immigrante” en la ciudad de Oklahoma, estuvo, Supermercado Morelos, panadería La Oaxaqueña, Carnicería la Hacienda, Supermercado Feria Latina, Buy for Less, tiendas de ropa Vaquera, salones de Belleza, centros de mecánica, tortillerías, y algunos restaurantes locales.
En Tulsa Oklahoma, casi todos los negocios de propiedad de hispanos fueron cerrados, con una con una nota en la puerta explicando la razón, en apoyo “Un día sin immigrante”. En Tulsa también se reportó, un gran número de estudiantes ausentes, más que de costumbre.
La Reforma migratoria se ha discutido por más de 20 años en el Congreso con poco o ningún movimiento a la solución. El Dream Act, con vías de residencia a los inmigrantes indocumentados respetuosos de la ley que llegan de niños, ha quedado pendiente desde el año 2001. En Tulsa y Oklahoma, el crecimiento demográfico es sin duda entre nosotros los hispanos, en gran parte debido a la inmigración. Aunque a nivel nacional y local el apoyo no fue total, se informó que muchos tenian el temor de perder sus empleos. Por otro lado, no está claro si el día sin inmigrantes hizo un impacto en la económica, pero la acción del jueves sin duda sirve como un poderoso símbolo de una comunidad diversa y unida. Se ha mencionado la posibilidad de otra acción como esta se realice nuevamente.
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